martes, 31 de agosto de 2010

Monogamia en la naturaleza

Redes para la Ciencia » A veces hay dos sin tres
Este pequeño artículo en el blog de Eduard Punset remite al artículo bastante más completo y, por supuesto, interesante, de su revista Redes para la Ciencia.
Aunque el objetivo de la publicación del blog sea promocional habría estado bien ampliarlo un poco y no sólo dejar una foto con un pie explicativo que casi no se lee de una especie de primates que son monógamos por naturaleza, ya que sin más información ha dado lugar a comentarios bastante despistados y a elucubraciones sin ninguna base.
Ya hacia el año 1988/89, en la Facultad de Psicología de Barcelona, dentro de Biología, dábamos un apartado de Etología y la monogamia natural en distintas especies animales fue uno de los temas que se trataron. Aunque en minoría, hay algunas especies de primates que son monógamas, no sólo los titis indicados a pie de foto del blog citado. (a la derecha se ve un gibón de manos blancas)
Entre las aves es un hecho bastante más frecuente, dándose un comportamiento poco corriente entre los machos que cuidan por un igual a las crías, incubándolas incluso y, por descontado, cuidando de su alimentación. La colaboración macho-hembra es muy estrecha.
Recordemos que en una de las más recientes películas de Pixar sobre pingüinos se mostraba como eran los machos quienes incubaban el huevo de la cría, un hecho totalmente probado.
De ahí, no de los pingüinos ni de las aves, sino sobre el tema de los primates construí una historia con intención de pasarla a guión, "The Mating Season" (La época de apareamiento), sobre la familia en plan clan (tema que algunos ya habéis descubierto cuánto me llega a gustar) y el tema de la fidelidad. El objetivo era confirmar que hay personas que por naturaleza son monógamas, fieles a una sola pareja y ello no tiene nada que ver con imposiciones y reglas sociales. Tendríamos que unos serían chimpancés -polígamos- y los otros gibones, una especie que vive en el sureste asiático y son fieles a su pareja hasta la muerte (gibones de mejillas blancas en la foto de la izquierda). Se demuestra así también un tipo de lazo afectivo muy estrecho seguido de un enorme sentido de pérdida.
Pero hay otras especies comprobadas. Últimamente se ha lanzado a bombo y platillo el descubrimiento en Colombia de que una especie pequeña que vive en la Amazonia, los zoqui-zoqui, también muestra ese comportamiento y esa colaboración tan estrecha en la cría de la progenie que es más corriente entre un buen número de especies de aves.
Resulta bastante molesto que ahora, en el año 2010 se nos venda como noticia reciente algo que se conoce desde hace un mínimo de 25 años.
Un apunte último y muy curioso. La monogamia en lugar de una desventaja, supone un mayor desarrollo de la mente puesto que exige competencias más desarrolladas.
¡Mira por dónde algunos caballeros tendrían que revisar sus ideas y teorías!
Buenos días y buena suerte.

2 comentarios:

  1. No acabo de ver claro eso del desarrollo de la mente. Yo diría que los leones son más inteligentes que las cigüeñas, por ejemplo.
    Eso no significa que me apetezca el papel de leona (ni el de león) sino que, en el caso de las personas, se supone que la unión debería estar basada en algo más que el puro instinto. Algo tan feo como el interés también merece ser tenido en cuenta.

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  2. Fíjate que además un montón de científicos pierden el tiempo buscando la razón del porqué hombres y mujeres son más o menos monógamos,intentando hacernos ver que en la prehistoria (que no en la prehisteria) se cambiaba de pareja como de camisa (bueno,como de taparrabos,ya me entiendes) por aquello de buscar para la descendencia una perfección que con la pareja que se tenía no se podía alcanzar
    Y como nosotros descendemos de ellos,pues así nos va.
    Entonces,según estos mismos científicos,¿Cual es la razón de que unos primates sean más "fieles" que los otros.
    Algo se les ocurrirá,seguro

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